Funcionario no, gracias

En España, el que no haya soñado más de una vez con ser funcionario, es que simplemente aun no ha entrado en el mercado laboral. Ser funcionario en España tiene el mito asociado de trabajar poco, cobrar mucho, y tener un horario muy reducido, y puede que en parte, sea cierto. Esto aunque no lo parezca también tiene su lado malo.

Un trabajo como el de funcionario, es muy estable, pero a la vez muy muy repetitivo. Si eres administrativo, hacer los mismos papeleos una y otra y otra vez.  Si eres informático, te aprendes el sistema que tienen, y puedes olvidarte de tocar otras tecnologías, que por otro lado, suelen ser antediluvianas. Y eso en el mejor de los casos, ya que al ser de la administración pública, se encargan los desarrollos a empresas externas, y mas que hacer de informático, tendrás que hacer de gestor de empresas que hacen trabajos para la administración.

Por todo esto últimamente me he dado cuenta, de que no quiero ser funcionario ni en broma. Alguien de nuestro oficio, si no aprende nada en lo que le queda de vida laboral, es un suicidio, o por decirlo de otra manera, se le atrofiará el cerebro, y eso, sin ninguna duda, es lo peor que puede pasarle a un informático. Y concrétamente a mi, como no aprenda algo que me guste, o me resulte útil en un año, me termino sintiendo un autentico inútil, o que simplemente no he pegado un palo al agua.

Nuestro sector se mueve tan rápido, y cambiar de una forma tan radical cada cierto tiempo, que como te estanques un poco, a los pocos años, serás un zombie que se ha olvidado de lo interesante de nuestro oficio: Poder aprender tecnologías nuevas, y darles una aplicación real, con proyectos actuales. Esto a los funcionarios no se les puede aplicar ni en broma. Intenta tu hacerle cambiar a la administración pública la arquitectura que llevan usando desde los días de la pre-historia, si por ellos fuera aun seguirían usando máquinas de escribir (Y así parece que es. Solo entrad en alguna web de el gobierno de España, y os echareis a llorar del dolor de ojos que os entrará al ver semejante atrocidad).

Así, que si eres informático, y estas pensando en opositar a un puesto de funcionar piensa en ello dos veces: ¿Realmente quieres estar en un puesto donde no aprenderás nada nuevo en tu vida, viendo las horas pasar con tecnología desfasada? Y si eres programador, mejor ni te cuento, ya que lo de usar ese nuevo framework que ha salido, con toda la potencia, funcionalidad y facilidad de uso, será para ti, una mera fantasía. Además el mercado laboral del desarrollo esta en auge, y raro sería que no encontrases un puesto que te llenase mucho más que ser un simple funcionario.

Mi punto de vista en este sentido es claro: Funcionario no, gracias, mereces algo mejor.

 

¿Te vienes mañana a mí casa y te invito a un café?

 ¡Zafarrancho de combate, todos en sus puestos! ¡Activen todas las defensas!

A las trincheras!

Este título del post, sería recibido de buen grado por cualquier persona normal. Un amigo te invita a su casa para tomar algo y pasar un buen rato juntos, contaros mutuamente que tal ha ido la semana, que proyectos tenéis en mente, que te parece esa chica del fin de semana pasado que conociste y con la que estás tonteando… Lo más normal del mundo para entendernos.

El problema es que, si esta frase se la dicen a un informático… mal asunto. Para los neófitos en informática, es como si tu mujer te dice: Tenemos que hablar. Todos los músculos en tensión, adrenalina disparada, preparado para recibir el envite y lidiar con ello como buenamente se pueda. Así es como nos sentimos los informáticos ante esa pregunta.

Por alguna razón que desconozco el trabajo de un informático vale exactamente 0 euros. Si tu le dices a un amigo pintor, que te pinte la casa, y te dice que te va a cobrar chorrocientos euros, no pondrás ninguna pega. Pero si le dices a tu amigo informático que te arregle el ordenador, y te pide dinero, tu primera reacción sería indignarte ¿Verdad? Así que lo que hace la gente es invitar al amigo informático a casa a tomar algo, como excusa para esa ñapa que necesita su PC desde tiempos de Matusalén, y encima pensando «Que generoso soy, le invito a un café únicamente por arreglarme el ordenador».

A este amigo informático se le asigna el nombre de pringao, y con toda la razón del mundo. Os dejo el enlace de como instalar vuestro propio pringao en un tutorial, que cualquier persona debería leerse (Para bien o para mal)

Mi inicio como pringao familiar empezó incluso antes de tener un PC en casa. No se que razón llevo a pensar a mi tío, que yo era el indicado, para configurar todos los canales de su nueva tele gigante de pantalla plana (Pero todavía CRT) que le había costado un pastizal, y que, segun el, era muy difícil de manejar. La cuestión es, que el pago por mi hora y media poniendo todos los canales en su sitio, fue un baño en la piscina de su casa, cosa que no terminé de entender, dado que, por suerte, siempre ha habido piscina en la casa donde vivía.

De pringao familiar me convertí en peor tipo de pringao, que en mi opinión, puede existir. El pringao vecinal. Tampoco se muy bien como llegué a ese punto, pero de repente me vi en casa de varios de mis vecinos al menos un par de veces al mes, porque su PC había cascado/muerto/iba lento y querían un formateo para que fuera bien (Por supuesto guardando todos sus programas, fotos, etc… y volviendo a ponerlos en el mismo sitio), con la gran recompensa de una Coca cola. En esta etapa llegaron incluso a pedirme que les hiciera una pagina web de recetas. Fue el primer momento, en el que ya me negué a hacerlo, y desde entonces parece que las cosas fueron un poco a mejor en el modo pringao vecinal, ya que misteriosamente dejaron de llamarme para hacer ningún arreglo más.

A la vez que tenia activado el modo pringao vecinal, el modo amigo pringao iba cobrando fuerza. Incluso entre los amigos que estudiaban informática, pero eran incapaces de cambiar en la BIOS el orden de arranque de los dispositivos. Este es el colmo de los colmos, pero por desgracia tocó aguantarlo.

Mientras tanto el modo pringao familiar seguía en su linea, y el amigo pringao disminuía (Ya que un informático termina casi irremediablemente por tener un circulo de amigos informáticos también, que a su vez son pringaos. Un circulo vicioso, vamos), empezó a aparecer un nuevo tipo. El pringao hermano de amigo. En cierto momento aprendí a modificar cierta consola de Noentiendo para que pudiera ejecutar backups, desde un disco externo USB. Esto tuvo la consecuencia de que entre los amigos de mi hermano, empezara a extenderse el rumor, y entré en modo pringao hermano de amigo. Este sin duda fue el comienzo de mi cambio. Me harté de tanta chapuza a gente que ni siquiera conocía, y le di un ultimátum a mi hermano: O cada consola venia acompañada de 40 euros, o iba a volver a su dueño exactamente como vino, o incluso con algún regalito no deseado. ¡Y funcionó! No me lo podía creer, me llegaban dos o tres consolas al mes, y tenía para pegarme un pequeño homenaje algún fin de semana. Por suerte, o por desgracia, esta consola ha pasado ya al medio olvido, y el modo pringao hermano de amigo pudo ser desactivado del todo.

Con todo esto, mi humor ante cualquier duda chorra o intento de arreglo de mensajes extraños en el PC (El peor de ellos el mensaje de internet explorer que da al entrar en una página segura, que pensaban que era un error…), o de modificación de móviles (Que esto merecerá un post aparte), cambió, en el sentido de que cada vez me volvía más animado, a castigar impunemente a todo el que osara acercarse a mi con dudas.

Un buen día pasando el rato muerto en internet, me topé con un blog con historias de cierto tipo, que realmente me conmociono. No porque fuera una maravilla el contenido, sino porque en muchas de sus historias, me sentía completamente identificado, y en las que el pringao digi-evoluciona hacia un ser superior. El BOFH 

No hay término élfico, en lengua Ent o de los hombres para describir como me sentí al descubrir que me encaminaba de forma imparable, a convertirme en uno de ellos. BOFH no es más que una abreviatura de Bastard Operator From Hell, o traducido de forma burda: Informático cabrón del infierno. Las historias sobre BOHFers tratan sobre un administrador de sistemas, que harto de que en el trabajo pasen de su opinión, abusen de sus conocimientos, o lo peor de todo, tener que tratar con lusers, empiecen a buscar venganza a través de las herramientas que disponen.

El blog que me encontré fue Wardog y el mundo (El BOFH más conocido en España, ya que el fenómeno BOFH fue iniciado por Simon Travaglia), y a los pocos días me compré el libro recopilatorio que tiene del blog para poder llevármelo de vacaciones. En uno de los viajes en tren, los demás pasajeros creo que pensaron que me faltaban varios tornillos, porque acabé llorando a lágrima viva, de la risa que me dio al leer el capítulo que corresponde al post Adioshola de su blog. Con el paso de los meses empecé a ver todavía más gente relacionado con el fenómeno BOFH, tales como el Blog de un BOFH cualquiera, escrito por ManOwaR (El cual también tiene una recopilación de su blog en formato de e-book en la plataforma BiblioEteca), bofhers.net, o la lista en Twitter con el hashtag #BOFHers

Desde entonces empiezo a verme como un semi-BOFH, ya que profesionalmente no soy administrador de sistemas, pero dado mi historial de pringao, podría definirme como un BOFHer casero, ya que he tenido que adoctrinar a algunos familiares lusers con técnicas no demasiado correctas, y además, ya hasta he conseguido cobrar por reparar ordenadores de gente. En posts siguientes iré contando poco a poco este adoctrinamiento tecnológico que he tenido que impartir, mis andanzas como técnico casero cobrando y sin cobrar. Espero que os sirvan como ejemplo para poder tratar con vuestros propios lusers e intentar sacaros un dinerillo.

Y esta, amigos míos, es mi trayectoria dentro del mundo del pringao informático. Un último consejo: Sí alguien os dice la frase ¿Te vienes a mi casa y te invito a un café? responded automáticamente sin ni siquiera dar oportunidad a decir nada más: Son 50 euros. Os aseguro que tendréis muchos menos dolores de cabeza